martes, 20 de octubre de 2009

BOLETÍN INFORMATIVO Nº 1

24 DE OCTUBRE: DÍA DE LA BIBLIOTECA

LA BIBLIOTECA DE ALEJANDRÍA


Recreación de la Biblioteca de Alejandría

Este lugar fue en su época de esplendor (S III a.C a S IV d.C) el primer instituto de investigación de la historia del mundo. Los eruditos de la biblioteca estudiaban el Cosmos entero, exploraban la física, la literatura, la medicina, la astronomía, la geografía, la filosofía, las matemáticas, la biología y la ingeniería. El genio florecía en aquellas salas. La Biblioteca de Alejandría es el lugar donde los hombres reunieron por primera vez de modo serio y sistemático el conocimiento del mundo.

Páginas Web relacionadas:
http://enciclopedia.us.es/index.php/Biblioteca_de_Alejandría
www.papelenblanco.com/bibliotecas/la-biblioteca-de-alejandria-centro-del-saber-universal
www.elpais.com/articulo/sociedad/Hypatia/.../

Para leer:
Luis Manuel Ruiz: Tormentas sobre Alejandría. Alfaguara, 2009.
María Dzielska: Hipathia de Alejandría. Siruela, 2004.
Pedro Gálvez: Hipathia, la mujer que amó la ciencia. Lumen, 2004

Para ver:
Documental: “La biblioteca de Alejandría”:




ACTIVIDADES: DÍAS 22, 23, 26 DE OCTUBRE

- Para los alumnos de 1º de Bachillerato:

Actividades de formación de usuarios.
Propuestas de lecturas:
   “La biblioteca de Babel” de J.L. Borges.
   El microrrelato: origen, definición y características. Selección de microrrelatos.


- Para los alumnos de Secundaria:

Propuestas de lecturas:
   Neil Gaiman: Coraline. Salamandra.
   Daniel Defoe: Robinson Crusoe, Vicens-Vives.
   Gustavo Adolfo Bécquer: Leyendas. Vicens-Vives
   Don Juan Manuel: Cuentos del Conde Lucanor.



 

“Cuando se proclamó que la Biblioteca abarcaba todos los libros, la primera impresión fue de extravagante felicidad. Todos los hombres se sintieron señores de un tesoro intacto y secreto. No había problema personal o mundial cuya elocuente solución no existiera: en algún hexágono. El universo estaba justificado, el universo bruscamente usurpó las dimensiones ilimitadas de la esperanza”.

La biblioteca de Babel