A mi modo de ver, y la impresión que me transmitió, Espido es una persona segura de sí misma y de carácter férreo e inamovible. También pude darme cuenta de que tiene las ideas muy claras y asentadas. Es una persona inteligente, y le gusta demostrarlo. Se mostraba muy cercana al público, y no miraba a nadie por encima del hombro, al contrario. Personalmente me agradaron mucho sus palabras, y el rato que pasé allí, unas dos horas. Conversó con los presentes de todo un poco, desde puntos claves de sus libros hasta temas de actualidad como son la violencia de género, la educación de los adolescentes o la influencia de la televisión en los más jóvenes. Para mí resultaba muy interesante escucharla y verla conversar con el resto, pero me era mucho más apasionante enfrentarme, digamos, cara a cara con ella. Es decir, el poder llevar una conversación al mismo nivel que ella y proporcionarle las respuestas adecuadas a las preguntas que me hacía deliberadamente. Es reconfortante saber que puedo mantener una conversación con alguien como ella, y me han sido muy prácticos algunos consejos que me dio. Como habrán notado todo esto fue para mí una buena experiencia, así que me alegro de haber podido asistir al encuentro, así de paso me firmó y dedicó un par de libros. Por supuesto recomiendo a todo el mundo que, al menos una vez, vaya a este tipo de actos. Nada más, no quiero aburrir a nadie, es mucho mejor verlo con sus propios ojos. ¡Un saludo!
Marina Bravo, Concejala de Cultura, y Espido Freire.
Artículo y fotos por Pedro J. Plaza.